
AUTORRETRATO CON PELLIZA 1500
Óleo sobre tabla, 67x49 cm.
Munich, Alte Pinakothek
Firmado con monograma y fechado,
con inscripción:
ALBERTUS DURERUS
NORICUS IPSUM ME
PROPRIIS SIC EFFIN
GEBAM COLORIBUS
AETATIS ANNO XXVIII
Su más célebre autorretrato, figura estilizada
Y simétrica pero viva, gracias a la maravillosa mano
Que sujeta la vestidura. Es el tercero y último de los
Autorretratos pintados por Durero.
En 1486 su padre le colocó de aprendiz con el pintor y grabador Wolgemut. De 1490 a 1494 realizó su viaje de aprendizaje; se detuvo en Colmar, en casa de los hermanos de Schongauer, el mejor grabador de la época, que acababa de morir. Después se trasladó a Basilea, donde parece que hizo algunas xilografías.
La pintura alemana debe al genio de Alberto Durero su carta de ciudadanía en la pintura europea del renacimiento. Los maestros italianos lo consideraron como a un igual y admiraron sobre todo las dotes de creador y compositor, de que hacía gala en sus grabados. Sus dibujos y grabados son admirables tanto por sus detalles como por la impresión de grandiosidad del conjunto. Su estilo arranca del dibujo nudoso de los góticos y alcanza la fluidez clásica.
J.Hans Sachsens poetischez Sendung.
1776
A nada debes quitar valor y nada
poner en ridículo,
nada embellecer y nada empeorar;
el mundo debe ser para ti
como lo ha visto Alberto Durero,
con su vida fuerte y su virilidad,
con la fuerza interior y su
inmutabilidad.

Óleo sobre tabla, 100x114 cm.
Florencia, Galleria degli Uffizi
Firmado con monograma y fechado
El cuadro de los Uffizi, según algunos, sería el panel central de un políptico ejecutado para Federico el Sabio y destinado a la capilla palatina de su residencia de Wittenberg.
Otros por el contrario piensan que éste fue su lugar de destino pero fue realizado como
una pintura autónoma, sin partes laterales. Fechado y firmado con el monograma grabado en la piedra en primer término, debajo de la Virgen, es uno de los cuadros de
Durero más importantes del periodo entre el primer y segundo viaje a Italia.

Las ruinas que aparecen en el fondo, caracterizadas por desnudos arcos construidos
con sillares lisos, atestiguan el interés que el pintor presta al arte italiano, interés que se refleja asimismo en el paisaje que se pierde en la lejanía, en el cielo poblado de ligeras nubes mediterráneas.

Los dones que los Magos traen al Niño son obras maestras de la orfebrería renacentista, objetos como el propio Durero había diseñado a veces y con los cuales estaba sin duda familiarizado del taller de su padre.
En la figura del rey que está justo en el centro del cuadro, que lleva el atavío y las joyas
más fastuosos, se reconoce apenas modificada, la fisonomía del artista. La espléndida copa que tiene en la mano es en todo semejante a las del denominado “Álbum de dibujos de Dresde”; tal vez fueron diseñadas por Durero para un orfebre amigo suyo en los años 1500-1503.

Desde Wittenberg, el cuadro pasó a la Kunstkammer del palacio imperial de Viena, donde permaneció de 1603 a 1792, año en que Rodolfo II lo utilizó como objeto de permuta con los florentinos, que a cambio le entregaron la “Presentación en el Templo”
De Fra Bartolomeo.
Considerado el artista más famoso del renacimiento alemán conocido en todo el mundo por sus pinturas, dibujos, grabados y escritos teóricos sobre arte, que ejercieron una profunda influencia en los artistas del siglo XVI de su propio país y de los Países Bajos.
EL artista alemán más importante del renacimiento y uno de los más grandes de todos los tiempos, nació en Nuremberg el 21 de Mayo de 1471 y muere en 1528, es enterrado en el cementerio de la iglesia de San Juan de Nuremberg.
Bibliografía:
Constantino Porcu
J.Bialostoki, voz Dürer en
Enciclopedia Ubiversale dell ´Arte.
E.Panofsky, la vida y el arte de Alberto Durero,
Madrid, 1982
Adoración de los Reyes Magos. Bloemaert Abraham
La Adoración de los Reyes es una escena dentro de la historia que hace referencia a estos personajes. En la religión cristiana los Magos son unas personas que aparecen en el Evangelio de Mateo (Mt 2-12) en el Libro del Nuevo Testamento. Mateo hace un relato muy escueto en el que no aparece ni el número ni el nombre de estos magos. A partir de Orígenes (185-224) y con los Evangelios apócrifos se van añadiendo datos y detalles que la Iglesia va aceptando y los artistas aprovechan en sus obras. La historia de los Reyes Magos ha tenido siempre una gran atracción para las narraciones artísticas.
Adoración de los Reyes Magos 1619. Diego Velazquez
REPRESENTACIONES EN EL ARTE
La escena de la adoración de Belén es una de las más antiguas en el mundo artístico. En ocasiones viene a tomar parte del episodio de la Navidad. El pasaje de la adoración ya se representaba en las catacumbas romanas donde puede verse a María en el extremo de la obra y a los otros tres magos llevando sus regalos sobre bandejas muy simples. El antecedente de esta representación está en las obras de la Roma Antigua en que las personas del pueblo sometido llevan presentes al romano vencedor durante la ceremonia conocida como triunfo.En el siglo V cambia la disposición de la escena situando a María en el centro entre los Magos y añadiendo la comparsa de los camellos. Más tarde en época bizantina aparece en la escena un ángel que lleva una estrella y uno de los Magos hace una genuflexión.
La escena va enriqueciéndose con otros detalles y a partir del siglo XVI pasa del puro simbolismo a lo anecdótico y atractivo.
Bibliografía:
Duchet-Suchaux, Gaston y Pastoreau. La Biblia
y los santos. Alianza Editorial.